La coronación de la reina puso el colofón a las fiestas de exaltación al río Guadalquivir. 
El actor sevillano Antonio Dechén fue el mantenedor de las fiestas

La LIV edición de las Fiestas de Exaltación al Río Guadalquivir culminaron ayer con la coronación de la Reina, Alba del Rocío Martínez Romero, en un acto que se celebró en el patio de armas el Castillo de Santiago, completamente abarrotado de público para presenciar el momento central de unos festejos que se han venido celebrando desde el pasado jueves y que desde hace medio siglo recuerdan el papel de este río andaluz en el devenir de sus pueblos ribereños.

El jueves tuvo lugar la recepción oficial de la alcaldesa, Irene García Macías, a la reina y las damas, que participaron posteriormente en la tradicional Fiesta del Mantón. El viernes, las jóvenes, acompañadas de familiares y amigos, fueron recibidas en Sevilla por representantes del Ayuntamiento de la capital hispalense para regresar en barco por el Guadalquivir hasta la ciudad.

El sábado tuvo lugar una Velada Poética en el Patio de Columnas del Palacio Municipal, en la que participaron once poetas de diferentes puntos de la geografía andaluza, la mayoría de ellos premiados en los certámenes anuales de poesía que organiza el Ateneo de Sanlúcar. Uno a uno los poetas recitaron algunos de sus mejores versos al público que llenó el recinto municipal.

La jornada festiva continuó por la noche con la tradicional corrida de toros en la plaza de El Pino, y en la que los diestros participantes dieron lo mejor de sí para que resultara, un año más, exitosa.

Por fin, ayer domingo el medieval Castillo de Santiago acogió el acto de la coronación de la reina en un escenario lleno de luz y color. Tras el habitual juramento y la declaración como reina por parte de la alcaldesa, Alba del Rocío Romero fue coronada por la regidora del año anterior entre un castillo de fuegos artificiales.

José Antonio Benítez, acompañado de dos jóvenes bailaoras, obsequiaron a la reina y a las damas con un espectáculo flamenco antes de que el delegado de Fiestas, Jesús Villegas, subrayara la importancia de las Fiestas del Guadalquivir y presentara al mantenedor del acto, el actor sevillano Antonio Dechén.

Tras recordar su infancia veraniega en la ciudad, Dechén leyó una narración preparada al efecto por el filósofo José Manuel Cano en la que realizaba un recorrido por las diferentes civilizaciones que vivieron y crearon a las orillas del Guadalquivir.

Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la interpretación de la obra ‘Ave Verum Corpus’ de Mozart por la banda de música Julián Cerdán en recuerdo de las víctimas del accidente aéreo de Barajas. La banda sanluqueña fue la encargada de amenizar la noche y de acompañar cada uno de los solemnes momentos del simbólico acto de la coronación, en el que también se interpretó una pieza dedicada a las Fiestas del Guadalquivir con arreglos del director de la propia banda, José Antonio López Camacho.

Una fiesta en los jardines del Palacio Municipal puso fin a la LIV edición de este tradicional evento veraniego, declarado de Interés Turístico Nacional.