Socialistas y mercenarios
SD.-El rearme moral y ético de la clase política, y otras aves de rapiña ligadas o causantes de la ruina de España, ni siquiera entra en los planteamientos de aquellos que por omisión o inacción lo han permitido hasta ahora.
La ciudadanía no soporta más esta burla constante que nos brindan, todos los días a través de los medios, los deshonestos y corruptos servidores del pueblo. Contemplamos atónitos, estupefactos e iracundos el bochornoso espectáculo diario así como los desatinos de los principales líderes de la nación incapaces de poner orden en sus propias filas, escondiendo la cabeza en los agujeros del otro para minimizar sus propias vergüenzas.
Un nuevo varapalo a la credulidad de los ciudadanos, en este caso socialistas, que votaron a sus representantes en la ciudad leonesa de Ponferrada. ¿Cómo es posible que los votos otorgados a una lista, pasen ahora por mor de estas bajezas políticas, a otro grupo para mantenerse en el poder a toda costa? ¿Cómo ningún gobierno del PSOE o del PP han cambiado este efecto transfugista después de tantos intentos? ¿Cómo es posible que miles de votos de una opción o alternativa política pasen de la noche a la mañana a otro partido o grupo? Las respuestas a todas estas preguntas es obvia: La Ley lo permite, pero a todas luces los legisladores siguen anclados en otros tiempos, un anacronismo, que al igual que el valor de un voto catalán o vasco no es igual que a uno manchego o andaluz, hacen de nuestro país, amén de las reiteradas pleitesías de los gobierno de España a vascos y catalanes para apoyar sus legislaturas, una enorme caja de Pandora con un candado demasiado débil para resistir los embates interiores de los secesionistas siempre deseosos de abrirse camino en un mar de desgracias para conseguir sus objetivos.
Las actitudes poco edificantes y amorales tanto del jefe del estado como su familia cuestionan cada vez más a la monarquía porque la ciudadanía sigue sin comprender la imputabilidad del Rey y la ausencia de transparencia en las cuentas, totales, de esta familia.
El PP tiene mecha para un rato acusando a los socialistas de no controlar a sus militantes dejando en mal lugar la figura de Rubalcaba, que dicho sea, nunca ha estado muy bien considerada, véanse los barómetros de opinión y de paso Bárcenas y sus hazañas o el caso Gürtel se deslizan poco a poco hasta el agujero negro del tiempo político y el laberinto de pasillos de juzgados .
Y los socialistas, ay los socialistas y su partido de Cien Años de honradez, se vuelven a ver las caras con la infame realidad de unos pocos mercenarios a los que Pablo Iglesias y la rosa o el capullo les interesa eso…… Todo sea por seguir comiendo y manteniendo a una troupe de sinvergüenzas que hasta ayer militaban en un partido decrépito, anquilosado y anacrónico que vive de su pasado, incapaz de imponer sus politicas progresistas relegadas a tertulias evocadores de Suresnes e Isidoro y al pairo de los movimientos sociales que les grita que… “sí se puede”.
Dejaron, ni se sabe, millones de parados, recortes de derechos, pensionistas más pobres, caudales públicos desaparecidos presuntamente para aupar a los suyos, etc.
El creciente descontento social, que cada día nos acerca más a la fractura social, es suficiente para que la mayoría de españoles no apoyen a hora al PP, pero tampoco creen que el PSOE tengan legitimidad moral para criticar a los que están siguiendo la tarea que los socialistas dejaron sin acabar. Al final la respuesta estará en la calle.
