Iluso de mi al creer en una utopía

Rafael Romero Pérez.-Es vergonzante ver la pegada de carteles para las próximas elecciones de todos esos sinvergüenzas que tienen la desfachatez de reírse del pueblo cada vez que respiran, dejan sin trabajo, sin comida, sin esperanza a tantas familias de nuestro pueblo sin que les remuerda la impermeable conciencia (si es que la tienen).
Nos están llevando a un infierno que cada día lo tenemos más cerca y verte en el borde de ese abismo con toda la familia  y sentir que no puedes ayudar a tus hijos, a tu mujer, a tus hermanos, tus padres (que algunos ya están pasando hambre), que te estás quedando sin fuerzas, sin esperanzas, sin vida (estando todavía vivo).

Iluso de mí al creer en una utopía en la que los políticos (sea de cualquier partido), se reunieran en las asambleas, plenos o como se llame, para bien del pueblo, para analizar propuestas y se eligiera la mejor, a retocarlas si necesitara un arreglo, porque a ese político le pagamos para eso, para que trabaje para nosotros. Y todo lo que veo es que se destrozan entre ellos, en sus propios comicios para elegir a sus propios candidatos que seguramente estarán impugnado por otros. Encima quieren que les creamos sus buenas intenciones, promesas inmortales de falsedades eternas.

Tenemos que hacer algo, no es normal que nos quedemos cabizbajo sin intentar poner algún remedio a todo esto, hoy es mi familia y muchas otras, mañana puede ser la tuya y no quiero que eso suceda ni que tú lo permitas.
Tenemos que hacerles entender que ya estamos hartos.  NO VOTES.