WWF rechaza la propuesta de Plan Hidrológico de la Demarcación del Guadalquivir

Este próximo viernes 4 de septiembre, WWF votará contra la Propuesta de Plan Hidrológico de la Demarcación del Guadalquivir (en adelante la PHDG) para el segundo ciclo de planificación, 2016-2021, sometido a consulta de los miembros del Consejo del Agua de la Demarcación del Guadalquivir. 

Tras revisar en profundidad las respuestas de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir a las alegaciones presentadas al proyecto del PHDG, WWF-España ha comprobado que el Organismo de Cuenca no ha modificado los contenidos del Plan a raíz de algunas alegaciones presentadas, en aspectos de capital importancia como son el incluir el dragado de profundización del Guadalquivir o el aumentar la presión sobre los caudales de Doñana con la propuesta de incrementar la regulación de la presa del Agrio o no ofrecer soluciones para los problemas de gestión del agua en los Espacios Naturales como Doñana. 

 

En general, WWF está en desacuerdo con los objetivos poco ambiciosos que plantea el plan ya que parten de un diagnóstico obsoleto y erróneo que sobrevalora el estado ecológico actual de las masas de agua y, por lo tanto, no establece las metas ni las medidas realmente necesarias. El Plan, que podría ser una oportunidad para solventar problemas históricos debidos a la mala gestión del agua en espacios como Doñana, no afronta directamente dichos problemas, ni aporta las soluciones necesarias, reiterándose actuaciones que a largo plazo y con las consecuencias del cambio climático se saben ineficaces, como son la construcción de nuevas presas y trasvases. Presa de Alcalá del Río, geográficamente la última de la cuenca del Guadalquivir.

 

 Por otra parte, pese a que se ha reducido a 4 el número de actuaciones relacionadas con el incremento de recursos disponibles (con las actuaciones previstas del incremento de la capacidad de regulación del embalse del Agrio, el embalse del Castillo de Montizón, el embalse de San Calixto y el embalse de Puerta de la Cerrada, este último para el horizonte 2021-2027) en lugar de las 21 planteadas por el borrador del Plan Hidrológico sometido a consulta pública, el Organismo de Cuenca reconoce que esta reducción está relacionada con adecuar el programa de medidas a las posibilidades presupuestarias y no para cumplir con lo establecido por la Directiva Marco del Agua.

 

WWF España entiende que las modificaciones introducidas en el documento del Plan Hidrológico de cuenca para el segundo ciclo de planificación a raíz de las alegaciones presentadas no corrigen algunos aspectos claves para la correcta gestión del agua en la cuenca del Guadalquivir, y que de ser aprobado con los contenidos actuales no supondrá una aplicación efectiva de los principios de protección y uso sostenible del agua que marca la Directiva Marco del Agua en los próximos 6 años.

 

El Guadalquivir es un río que cuenta ya con una diferencia entre demanda y agua disponible de más de 600 hm3/año, algo que se agravará con el cambio climático. Sin embargo, el plan sigue primando el apoyo al regadío frente al cumplimiento de los objetivos ambientales, y no establece un límite a su crecimiento, comprometiendo aún más su permanencia en el futuro.

 

Según Eva Hernández, Responsable del Programa de Aguas de WWF España: “La Propuesta de Plan no responde a los retos que el Guadalquivir tiene que afrontar los próximos años y sólo perpetua el actual modelo de desarrollo rural apoyado en el regadío”. Y recuerda que: “Debemos evitar tomar decisiones irreversibles que comprometan el futuro de los ríos, humedales y acuíferos, ya que de ellos depende el agua para las generaciones futuras”.

 

No se da cumplimiento a la Sentencia del Tribunal Supremo sobre el dragado .WWF España considera que el proyecto del PHDG no ha incorporado todo el contenido de la sentencia del Tribunal Supremo sobre el recurso que presentó esta organización contra el anterior Plan Hidrológico y vuelve a incluir, en este caso en el Programa de Medidas, la actuación correspondiente al Dragado de profundización del canal de navegación del puerto de Sevilla en el Estuario del Guadalquivir. En la ficha justificativa de esta actuación, la CHG afirma que la misma “…no supone una modificación significativa del régimen hidrodinámico, por lo que su efecto sobre las masas de agua sería muy moderado, mejorando incluso algunos de los parámetros actuales como la renovación de las aguas estuarinas, la capacidad de circulación de las avenidas e incluso las condiciones de turbidez y salinidad”.

 

Esta consideración contradice lo expuesto por el Tribunal Supremo y es cuanto menos cuestionable para WWF, de acuerdo con las conclusiones del documento técnico “Propuesta Metodológica para diagnosticar y pronosticar las consecuencias de las actuaciones humanas en el Estuario del Guadalquivir”. Asimismo, la ficha indica que que “…la actuación propuesta no repercutirá negativamente en la dinámica, morfología y biodiversidad del estuario al llevarse a cabo las medidas propuestas…”. Sin embargo, el Plan se limita a recoger el listado de las actividades previstas sin más datos o análisis que justifiquen su “efectividad”.

 

Por último, la CHG considera que esta actuación no comprometería permanentemente los objetivos ambientales, lo cual, a juicio de WWF no responde a la realidad de una actuación que requerirá dragados de mantenimiento anuales para mantener las condiciones proyectadas (es decir, 8 m. de calado y 85 m. de anchura en el canal), con las negativas consecuencias que ello tendrá sobre el estado del río.

Por todo ello, WWF pedirá en la reunión del Consejo del Agua de la Demarcación, la necesidad de excluir el dragado de profundización de la planificación hidrológica, ya que esta es una actividad que no contribuye al buen estado del estuario, tal y como ha sentenciado el Tribunal Supremo este mismo año, y tendrá efectos negativos ambientales y socioeconómicos en el Guadalquivir y Doñana.