Indiferencia y falta de respeto del equipo de gobierno

Comunicado de la AAVV Las Palmeras Cuesta Blanca

Ante el revuelo suscitado por las obras del programa INVIERTE 2017 que se están realizando en el bulevar de nuestra barriada, nuestra Asociación de Vecinos se ve en la obligación de realizar el presente comunicado para aclarar y desmentir ciertas informaciones que se han publicado en los últimos días.

Los vecinos de la AAVV Las Palmeras-Cuesta Blanca llevamos advirtiendo al Ayuntamiento de una creciente serie de deficiencias en nuestra barriada, que dejamos patentes mediante la recogida de más de 500 firmas. Entre las más acuciantes:

- Exigir a la Junta que se terminen los accesos por la carretera de Chipiona (No se nos ha enseñado aún ni siquiera el proyecto).

- Falta de presión y cortes en el agua corriente (se nos prometió terminar las obras en diciembre de 2017)

- Baches, agujeros y zanjas en calzadas y aceras, que las hacen casi impracticables.

- Falta de limpieza regular de calles, de contenedores y papeleras.

- Falta de desinsectación regular.

- Marquesinas

- Aceras de las que crecen plantas de medio metro de altura.

- Terrenos educativos olvidados, pues existe un colegio público sin hacer (con demanda masiva de plazas escolares en la zona).

…

AÑOS DE INDIFERENCIA A NUESTRA VECINDAD.

Llevamos casi 3 años intensificando nuestras peticiones, vía telefónica, vía administrativa y vía telemática, respetando plazos y formas al máximo. Tenemos decenas de solicitudes por escrito, compulsadas y archivadas (las últimas con certificado digital) durante todo ese tiempo, en el que el Equipo de Gobierno no se ha molestado en responder por escrito a uno sólo de esos documentos. Algo, por cierto, que atenta contra la Ley de Transparencia de Andalucía, y que obliga a las Administraciones a responder a las solicitudes en un tiempo máximo de un mes. Se llegaron a recoger en junio de 2017 más de 500 firmas de nuestros convecinos, exigiendo mejoras para la barriada. Todo ese esfuerzo sólo se ha visto traducido en alguna poda de árboles, una marquesina, y la nueva presencia de algunos contenedores de reciclaje. Absolutamente insuficiente dadas las necesidades y la cantidad de tiempo pasado.

Se han celebrado, además, varias reuniones con nuestra Junta Directiva y varios vecinos, tanto en nuestra sede como en el propio consistorio. Nuestro ánimo, en un principio, siempre fue constructivo, con la idea de poder llegar a acuerdos e ir solventando problemáticas y alcanzando objetivos poco a poco. Pero la actitud de los concejales, dando largas a los vecinos con promesas siempre incumplidas, fue tensando las reuniones debido a la creciente indignación vecinal, cansada de reuniones absolutamente improductivas.

EL PLAN INVIERTE 2017

Justo el verano pasado, con nuestros vecinos irritados por los 9 cortes de agua que sufrimos en apenas 2 meses, vinieron a ofrecer el Plan Invierte 2017, con un coste de 120000€, de arreglos para la barriada. Se nos dijo que podíamos participar en la confección de ese proyecto. Nuestra primera respuesta fue que se repartiera el dinero para solucionar los problemas más acuciantes (asfaltados, aceras, mejoras en los suministros…) pero se nos respondió que apenas daría para hacer nada, y la obra debía concretarse en algo más tangible del que pudieran beneficiarse todos los vecinos, puesto que el resto de obras podía ir realizándolas poco a poco el propio Ayuntamiento. Así, accedimos a realizar un arreglo de bulevar, teniendo en cuenta también su deterioro. Tras una segunda reunión donde se nos mostró el borrador del proyecto, hicimos una serie de propuestas de mejora que, en gran medida, fueron aceptadas a priori. Sin embargo, meses después supimos que el proyecto ya estaba redactado sin haber tenido en cuenta ninguna de las mejoras que exigimos los vecinos. Tuvimos que realizar una solicitud por registro telemático, haciendo que constase nuestra discrepancia con el proyecto, que no se correspondía con la opinión y la participación de los vecinos. Solicitud que, salvo una respuesta de un técnico de medio ambiente a un aspecto concreto, no recibió respuesta formal de ninguna concejalía.

LA ÚLTIMA JUGARRETA

Hace escasos días, vivimos un vergonzoso hecho que muestra su talante y descortesía, y que nos parece de una absoluta falta de respeto institucional a nuestra Junta Directiva que –les guste o no- es la representación democrática de los vecinos de la barriada:

El pasado 15 de mayo, pudimos leer en una nota de prensa con el titular: “EL AYUNTAMIENTO EXPLICA A LA FEDERACIÓN DE VECINOS ACOMPAÑADOS DE VECINOS DE LAS PALMERAS LAS OBRAS QUE SE ESTÁN REALIZANDO”. Nuestra sorpresa fue mayúscula, puesto que NO SE INVITÓ AL ACTO A NINGÚN MIEMBRO DE NUESTRA JUNTA DIRECTIVA, ni oficialmente ni por teléfono. Por tanto, sólo existen dos opciones: que sea MENTIRA que hubieran vecinos de Las Palmeras, o peor aún, que se invitara a dedo a ciertos vecinos de Las Palmeras sin contar con sus representantes electos de la AAVV LAS PALMERAS. El Ayuntamiento debería explicar a quién invitó de nuestra barriada, y por qué faltó el respeto así a esta AAVV. Y para rizar el rizo, se permitieron el lujo de incluir en la nota de prensa, prácticamente las mismas propuestas de mejora –ahora sí- que nosotros habíamos realizado.

CHAPUZAS Y RIESGOS LABORALES

Las obras, además, han empezado sin aviso y sin la debida señalización ni delimitación con vallas, en un claro caso de incumplimiento de unas mínimas medidas de seguridad exigidas por la ley de prevención de riesgos laborales,entrañando un serio peligro para viandantes, especialmente niños.

Hace escasos días, pudimos ver la última y chapucera imagen de las obras, con gran difusión en las redes, de un colchón con piedras tirado por una furgoneta como “método” de compactación del albero del bulevar. Colchón que, por cierto, ni siquiera tuvieron el detalle de llevar al punto limpio de la ciudad. Una imagen tercermundista que nos hace plantearnos la seriedad presupuestaria y técnica de este tipo de proyectos

CONCLUSIÓN

Este es un ejemplo más de la transparencia y la participación ciudadana de la que hacen gala en estas últimas legislaturas. La participación ciudadana no se mide por el número de reuniones mantenidas sino por la productividad de las mismas, tanto en el respeto a los acuerdos alcanzados como en las promesas que se cumplen. El descontento con este Ayuntamiento, no está sólo en su incapacidad de solucionar cuestiones concretas en plazos razonables, sino en su nula empatía, respeto y escucha a la ciudadanía de Sanlúcar. Y ello se está poniendo de patente en otros muchos ámbitos, como están demostrando los últimos conflictos abiertos con comerciantes, ecologistas y vecinos, a los que insulta en ruedas de prensa e intervenciones plenarias, tachándolos de politizados o de hacer campaña electoral a la oposición.

Nuestra AAVV sólo se debe al bienestar y el desarrollo de su barriada y sus vecinos, y por ese motivo, jamás se ha circunscrito a ningún partido político. Algo que debería hacer extensible el Ayuntamiento. De hecho, además de las reuniones con el equipo de gobierno, tras estos hechos todos los partidos de la oposición han querido conocer nuestra problemática, y se les ha informado cordialmente en igualdad de condiciones. Sabemos, tras años de muchas promesas incumplidas, que la política no se basa en palabras, sino en hechos tangibles.

Por tanto, exigimos al Ayuntamiento que trate a nuestros vecinos y sacrificados contribuyentes de esta barriada, con el respeto y la consideración debida. Que cumpla con la legalidad en materia de transparencia, y responda a las solicitudes registradas en tiempo y forma. Que concrete la participación ciudadana en menos reuniones de cara a la galería y ruedas de prensa, y más actuaciones y compromisos firmes que resuelvan de una vez los problemas más acuciantes que sufren cada día nuestros conciudadanos.