Con nocturnidad y alevosía
Así actuaron este pasado jueves 22, cuando la Policía Local de nuestro pueblo, no sabemos aún por orden de quien, mandó a Endesa a retirar el enganche de luz a las familias que habitan en la corrala de la c/ Alcoba. Esto se produjo cerca de las 23.00 horas, que es cuando los trabajadores de dicha empresa se personaron, en dicha corrala, para proceder al desenganche. Como es lógico, las familias sufrieron unos minutos angustiosos.
En esta corrala, como en todas, hay mayoría de mujeres y niño/as; en ésta en concreto tienen bebés recién nacidos, algún pequeño enfermo con bronquitis. Estas familias se han visto abocadas a tomar la iniciativa, para poder dar un techo a sus hijos/as, por culpa de la indiferencia institucional. El paro es una realidad que llevó a muchas familias jóvenes a sufrir un paulatino deterioro de su nivel de vida, al punto de no encontrar otra salida, para que sus hijos/as no sufrieran más de lo necesario en esta circunstancia.
No entendemos por qué encima de ser las auténticas víctimas de la crisis, nuestro Ayuntamiento las sigue castigando, no sólo con la negación a su empadronamiento, con las consecuencias que conlleva de no poder acceder a trabajos que ofertan los Servicios Sociales, la luz, el agua, sino que se les sigue tratando como a ciudadanas/os de segunda.
Consiguen de Endesa la luz. Y aparece esta orden a Endesa de que se la quiten, en pleno invierno y con nocturnidad.
¿Hasta cuándo van a tener que soportar este desprecio de su Ayuntamiento, de su Alcalde? Un Alcalde que se llama socialista ¿cómo puede colocarse del lado de Endesa, de la banca, de los poderosos y abandonar al pueblo que sufre?
La solución pasa por hacer políticas sociales, un estudio a fondo de la situación de cada familia que mal viven en esas corralas como las que están hacinadas en casa de familiares, garajes, locales abandonados, o como sabemos, recogidas por la caridad de alguna familia, asociación, o convento, y sentarse con los bancos, SAREB, y acaparadores de vivienda para llegar a un acuerdo de negociación y ponerlas a disposición del pueblo bajo un alquiler social como se está haciendo en otras ciudades y municipios. Parece que hay un interés desde el equipo de gobierno para que esta situación no se sepa, y que la imagen que tengamos todos y todas los sanluqueños/as sea la de sol, vino, langostinos, y manzanilla. Sea valiente Señor Alcalde y coja el toro por los cuernos. Los problemas de esta ciudad son para hacerles frente, no para mirar a otro lado. Es por eso que solo es una cuestión de voluntad política.
