El niño pepero
A la manera de El niño yuntero de Miguel Hernández con un cameo del Arcipreste de Hita y un guiño a Don Mendo, que habrá que verlos.
Mezclador: Daniel Lebrato.
EL NIÑO PEPERO
Carne de yugo, ha nacido[1]
más estirado que bello,
por las flechas perseguido[2]
y en Moncloa habrá que vello.
Nace, como las encuestas,
a las Cortes destinado,
si el Congreso no se presta
da un pispás con el Senado.
Entre estiércol puro y lleno
de fachas, trae a la vida
un programa de relleno
viejo ya y españicida.
Empieza a elegir y empieza
a cargar de punta a punta
la corrupta, el sinvergüenza,
quien les pague y quien les unta.
Trabaja y, mientras la caja
B ‑que ha urdido mente en serio‑
unta la suya, él baraja
sillones y ministerios.
Empieza a escañir y siente
que ha de durar lo que espera
más que duró Presidente
pues que será la tercera.
Contar escaños no sabe,
y ya se ve ganador,
que es una corona grave,
ganando, ser perdedor.
A fuerza de Mérkel, fuerte,
y a fuerza del Rey, crecido,
con Constitución, con suerte,
despedaza un país reñido.
Cada nuevo día es
más ¡joder!, más ¡cara dura!,
¡gentuza!, para después
darles más legislatura.
Y como el país se hunden
en la mierda lentamente
para que la Audiencia inunde
de aforados su expediente.
Me duele este pueblo y siento
como una gran losa encima
y su vivir tan contento
de o nosotros o la ruina.[3]
Les oigo hablar de los rojos,
de Venezuelas, chanchullos
de los demás, no el despojo
que están haciendo los suyos.
Me duele ver que un escándalo
tras otro y otro lo aguantan,
supositorios de sándalo
desde el ujier a la Infanta.
¿Quién salva a España de pillos
peores que una gangrena?
¿De dónde saldrá el martillo
verdugo que esta cadena?
Que salga del corazón
de los votos que les dieron,
que antes de ser votos son
y han sido votos peperos.
*
[1] Carne del yugo y las flechas (ENP2)
[2] por las urnas perseguido (ENP2)
[3] “a favor” de tanta ruina. (ENP2) “a favor”, lema de campaña del PP el 26‑J.