Servicios sociales y el centro de drogodependencia ponen en marcha un curso de pintura de edificos para personas en fase de rehabilitación
Es un hecho comprobado el que una alta proporción de drogodependientes que inician la fase de deshabituación a drogas no han realizado nunca una actividad laboral y además carecen de la adecuada formación para ello, con lo cual tienen verdaderamente difícil su inserción laboral que es la base para una plena reincorporación a la sociedad.
Con objeto de facilitar la inclusión social de estos jóvenes desde la Delegación de Asuntos Sociales que dirige José Luis Alhambra, al igual que el año pasado que se realizó un curso de jardinería, en esta ocasión se ha puesto en marcha uno de pintores de edificios que está destinado a pacientes del centro de drogodependencia de Sanlúcar. Este curso de FPO que se ha iniciado hoy tendrá una duración de 60 días y consta de formación teórica que se impartirá el en Aula Joven del Polideportivo Municipal y de clases prácticas que se llevarán a cabo pintando distintos edificios públicos de Sanlúcar.Esta iniciativa ha sido posible gracias a la colaboración del Área de Igualdad de la Diputación de Cádiz a través del Centro Provincial de Drogodependencia y a la aportación económica y de personal de la fundación FADAIS (Fundación para la Atención e Incorporación Social). Con este tipo de iniciativas se pone de manifiesto que en el Centro de Drogodependencia de Sanlúcar de Barrameda no sólo se ocupan del tratamiento de las personas con algún tipo de adicción sino que una parte fundamental de la labor que se viene desarrollando en este centro es la prevención y la reinserción social, familiar y laboral de las personas que padecen esta enfermedad. Han sido los profesionales de este centro los encargados coordinar este taller con la Delegación de Servicios Sociales y de seleccionar a aquellos pacientes que están en una fase más avanzada del tratamiento de deshabituación y por tanto en situación optima para beneficiarse de este curso . Con esta iniciativa se espera posibilitar la adquisición de conocimientos para el aprendizaje de un oficio y facilitar la adquisición de habilidades sociales y laborales que hagan más factible el proceso de inclusión social de los jóvenes con problemas de drogodependencia.
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