Aún siendo un camino lento...…el silencio no es justificación

No lo pensaba, ni siquiera me había planteado que estas líneas que ahora leen estén escritas a más de una centena de kilómetros de la Puerta que fuera de Las Américas, pero aquí me hallo sentando en las escalinatas que dan acceso a la plazoleta bajo el monumento de Las Setas, en esta plaza de la Encarnación de Sevilla. Con papel y la pluma que habitualmente es compañera de fatigas, de sentimientos, pasiones y una “jartá” de tachones.

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La calor de este día de Levante no hace presencia aún en estas escalinatas, las cuales  pese a estar vacías están constantemente transitada de locales, foráneos y turistas cámara en mano, o simplemente buscando un lugar fresco donde descansar los doloridos pies. Aunque yo descansar pretendiera, difícil tarea la de fijar la mirada en este blog de notas, mientras pasa por mi vera las bellas musas de pintores, escritores y escultores, ceñidas en ropas cada vez más justas, atrevidas y resaltando, cuantas curvas tengan las setas, las de una mujer son mil veces más hermosas.

Dos días asistiendo a conferencias, aprendiendo y olvidando al mismo tiempo. Ayer miércoles en Sanlúcar de Barrameda, una sobre las marismas y los médanos, o los médanos y las marismas, Cádiz y Tenerife, o El Médano y Sanlúcar. Ambos lugares me han visto crecer. Uno, El Médano, desató mi pasión por el misterio. El otro, Sanlúcar, me zambulló de lleno en los misterios incomprensibles del ser humano y de la vida misma.

 

Quizás la conferencia faltó a su título, y de marismas se olvidaron de hablar, este compendio de pequeños islotes del lago Ligustinos que tanto bien contribuyó al rentable negocio del contrabandeo, con los artículos que llegaban a nuestra ribera procedentes de diferentes partes del mundo. Una palabra “contrabando” que en nada su uso hoy tiene que ver con el noble arte de la subsistencia de una sociedad medieval carente de muchos productos destinados a las gentes pudientes. Pero no puedo dejar de transmitir mis felicitaciones al Dr. Manuel Fariña González, por la ponencia que nos ofreció.

 

En otro orden de cosas felicitar también a los responsables del Consistorio sanluqueño, por el esfuerzo de traer a la villa a los integrantes de la Red Mundial de Universidades magallánicas para la investigación y la ciencia. Es aquí donde quiero dejar claro, que a nivel general las gestiones municipales puedan ser discutibles, pero la labor de ediles y personal técnico en los últimos tiempos para con esta conmemoración no deja de ser reconocible. Aunque seguiré diciendo que llegamos casi tarde, por no decir tardísimo a las efemérides de esta gran gesta de Magallanes-Elcano.

 

Decía estar en Sevilla y, esto sí que es imperdonable a la ciudad y gobernantes de Sanlúcar, que uno se tenga que desplazar a Sevilla para asistir nada menos que a una conferencia del que es nuestro DUQUE de Medina Sidonia. La persona que junto al Alcalde de Sanlúcar debería de estar abanderando este proyecto, bueno… vale lo dejo en “proyecto”, vale, le quito una comilla `proyecto´.

 

Que decir tiene  que escuchar a D. Alonso hablar de un antepasado suyo y de esa coetánea vida entre Cervantes y el Séptimo Duque de Medina Sidonia, no tiene precio. Porque y perdonad, que marque aquí una pequeña gran salvedad, “Sevilla no tiene el Ducado de Medina Sidonia”, “El representante institucional de dicha casa, es sanluqueño” y en este pueblo seguimos mirando para Sevilla esperando a que nos meen y encima hacer la ola, agradecidos.

 

Pero ¿cómo me puedo quejar de mis convecinos?, si en eso de vender Sanlúcar se lo toman al pie de la letra.

 

En fin, que como el Duque D. Alonso, hay otros tantos sanluqueños y sanluqueñas de bien dedicados a labrarse un futuro y poner a Sanlúcar en el sitio que se merece, pero aquí como si ná. Ese sí que es el sello de identidad de Sanlúcar. Como dijera aquel gran filosofo: “Sanlúcar jamás tuvo langostinos, estos eran de Madagascar”

 

Sanlúcar de Barrameda con su XXII Duque de Medina Sidonia.