A  vueltas con Pizarro:

Antonio Romero.-De nuevo mostramos en Sanlúcar no tener idea de celebraciones, actos y conmemoraciones. Desde mi más humilde ignorancia, y sin ánimo de ofender a nadie, lo que ha ocurrido estos días en Sanlúcar vuelve a demostrar que la clase política, y cultural en algunos casos, vuelve a actuar sin criterio. No es la primera vez que celebramos, enmarcamos, o elogiamos efemérides, personajes o yo que sé que, fuera de tiempo, lugar y sentido.

Toda esta retahíla, viene al caso de la estatua que hemos tenido a bien inaugurar todos los sanluqueños en la Avenida de la Estación. Estatua de un conquistador oriundo de Trujillo (Cáceres), y que partió a hacer las Américas (Indias por aquel entonces…), que como mucho pasaría por Sanlúcar en algún navío que viniese de la capital Hispalense para zarpar destino al otro lado del Atlántico.

No tiene mucho sentido que este personaje histórico, de dudosa moral todo sea dicho de paso, (pues acometió las mayores matanzas de la colonización, pero ese es otro tema) tiene que ver con el primer viaje de circunnavegación que realizaron Magallanes y Elcano. Si a esto le unimos, lo anteriormente comentado de la falta de relación con Sanlúcar, hace que uno se plantee que es lo que ocurre aquí.Se me ocurren varias cosas, a cual más grave.

Una, la escasa formación de la clase dirigente de nuestra localidad (mal endémico por cierto, no achacable solo a este equipo de gobierno), lo que deja mucho que desear, y se plantea uno en qué tipo de manos está el futuro de nuestra localidad.

Otra cosa que se me ocurre es que el gobierno local y/o la clase culta de nuestra ciudad, han pensado que el pueblo es una especie de rebaño que no sabe de lo que se les habla y nos encasquetan una tras otra porque nunca nos levantamos y nos quejamos…

Ahora bien, un monolito a una Coronación Canónica en un entorno religioso no se puede poner porque puede herir la sensibilidad de los laicos, ateos y personas que procesen otras religiones, pero si podemos poner un monolito, en un lugar que se rompe la estética de la plaza, y de una persona que está catalogada como de los mayores asesinos por la historia de Sudamérica. No pueden sentirse ofendidos también los sudamericanos que viven con nosotros.

La verdad es que no creo que se molesten ni unos ni otros.Por último, antes de escribir sobre este tema he intentado informarme lo mejor posible sobre el conquistador y por más que he leído no he encontrado relación alguna con tal evento, y por desgracia no puede asistir a la conferencia que se llevó el otro día a cabo.  Así, que desde mi más profunda ignorancia, pienso que esto es otra con queso…