Sin capitán ni tripulación, Sanlúcar a la deriva

Mark Felt.**-En una localidad como la nuestra, marinera, dónde muere el Rio Guadalquivir y descansa el Coto de Doñana, dónde somos gobernados por un barco con bandera pirata, capitaneado por el Sr. Mora, que pasó de marinero de agua dulce a capitán, ya que nuestra anterior capitana, decidió abandonar el barco a la deriva porque tenía intereses en otros mares cercanos y veía que cuando llegará a puerto el recibimiento no sería el de las sonrisas. Sonrisas que no llegaban a ninguna parte y que escondían su falta de gestión y de capacidad para llevar un barco tan importante como el de Sanlúcar de Barrameda.

Como Jefe de máquinas, con plenos poderes, y presumiendo de independencia allá por dónde vaya el Sr. Marín. En contra del parking de la Calzada hace algunos años, encadenado ( de forma humana) para la defensa de Arizón, con antecedentes de afiliación en otros partidos políticos, y que ahora nos sorprende con sus ganas de cooperar con otros partidos para crear un proyecto de ciudad, como ocurrió recientemente con el Partido Andalucista del sempiterno Prats. Eso sí, durante los cuatro años que dura la legislatura en Comisiones Informativas se ha dedicado a rechazar todas las mociones y propuestas presentadas por los grupos de la oposición. Mal estratega y pésima idea. En política no todo vale y ya le queda poco por engañar.

 

Y el resto de la tripulación, abnegados en las políticas de sus superiores, con lagunas en todas las áreas y achicando agua como pueden porque sino el barco se hunde. Un barco que no llega a puerto, porque cuando se carece de proyecto, de ideas y de ilusión, se van dando tumbos, sin un rumbo fijo, sin una llegada a un sitio concreto. Este equipo de gobierno deambula,  van agotando los últimos meses como pueden, malgastando recursos municipales, con dudas sobre la legalidad de algunas actuaciones, como el escrito presentado por un partido político ante el Juzgado de primera instancia por la concesión de las Escuelas de Verano al contramaestre Collado, ex asesor económico del Capitán Mora.

 

Las últimas noticias que ha conocido el barco, ha sido el incidente en el CEIP el Picacho y las condiciones de la Biblioteca Municipal. Dos ejemplos más de que a pesar de los avisos previos del AMPA y de los usuarios de la biblioteca demuestran la falta de conocimiento de los problemas que asolan a Sanlúcar, un desconocimiento que tiene su origen en la despreocupación de lo que ocurre en nuestra localidad.

 

Se acercan las elecciones y el barco intenta enderezar el rumbo, pero se antoja complicado. Ni el capitán ni su segundo saben hacerlo, no conocen la ruta exacta y amenaza temporal. Las aguas bravas hacen zozobrar el barco y la tripulación teme su pérdida de privilegios.

En definitiva, un barco a la deriva que terminará encallado en las próximas elecciones cuando los sanluqueños les hagan ver que la falta de gestión y de política tienen sus consecuencias.

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