Usamos cookies propias y de terceros que entre otras cosas recogen datos sobre sus hábitos de navegación para mostrarle publicidad personalizada y realizar análisis de uso de nuestro sitio.
Si continúa navegando consideramos que acepta su uso. OK Más información | Y más
¿Por qué no te callas?
 
 
 
 
 
 
 
¿Por qué no te callas? PDF Imprimir E-mail
Usar puntuación: / 2
MaloBueno 
23 de Junio de 2015
"Ya para entonces la degradación de Venezuela formaba parte del código ético del bipartidismo. Como perros rabiosos utilizaron ese puerco argumentario para descalificar a Podemos y a dirigentes de Podemos."
Segunda parte de Venezuela
Bolivarismo se opone a monroísmo, las dos son maneras de entender la política y la independencia vistas desde el lado de América. El bolivarismo o bolivarianismo, por Simón Bolívar (Caracas, 1783 ‑ Santa Marta, Colombia, 1830), es la ideología cívico humanista que une la independencia de las repúblicas americanas con un grado mayor o menor de socialismo o socialismo del siglo 21, surgido a raíz de la revolución democrática en Venezuela. El monroísmo o Doctrina Monroe, por el presidente James Monroe (1758‑1831), se sintetiza en la frase «América, para los americanos», elaborada por John Quincy Adams, cuando era su Secretario de Estado, en 1823. El monroísmo establecía que cualquier intervención de los Estados europeos en América sería vista como un acto de agresión que requeriría la intervención de los Estados Unidos. La Guerra de Cuba en 1898 fue una puesta en práctica. La doctrina Monroe tuvo consecuencias incluso lingüísticas. La palabra América dejó de nombrar un continente y pasó a sinónimo de los Estados Unidos. 

De manera que hoy la doctrina se formularía así: «América del Sur y Centroamérica, para los EEUU». Frente al monroísmo imperialista, el bolivarismo liberador es una gran respuesta (otra sería la unidad popular) de América del Sur y Centroamérica (si México no mirase tanto a Estados Unidos) frente al expansionismo que viene del norte. Para que nos caiga mal el bolivarismo, han tenido que asociarlo al chavismo, por el presidente Hugo Chávez (1954‑2013) y su continuador, Nicolás Maduro, quien venció en las últimas elecciones presidenciales del 14 de abril del 2013 con el 50,61% de los votos, frente al 49,12 de Henrique Capriles Radonski. ¿Qué hay en Chávez de golpista y en Venezuela de dictadura? En 1992 el comandante Hugo Chávez intentó un golpe de Estado. No lo consiguió, estuvo preso y en 1998 se presentó a elecciones ganó amplia y limpiamente una tras otra.
 
El golpe de Chávez iba contra Carlos Andrés Pérez, un personaje que, aparte de ser amigo de Felipe González, se vio separado de sus funciones por el Congreso Nacional en mayo del 93 por un delito de malversación de fondos públicos, único presidente en la historia en ser destituido por una acción judicial, y fue a exiliarse a Miami, ¿dónde si no? Al comandante Chávez lo indultó Venezuela a través de Rafael Caldera, sucesor de Pérez, pero la España negra no lo indultó jamás. Ya está ahí con su adjetivo épico el golpistaChávez. Como la oposición a Chávez, y luego a Maduro, no reconoció su derrota, la operación estaba cantada: negar validez a las elecciones, contragolpear mediante paros, protestas y manifestaciones a riesgo de violencias y esgrimir que hay muertos y políticos presos.
 
En conclusión: Venezuela es una dictadura, con dos focos de libertad, para fuga de capitales y grupos de presión, o sea, Miami y Madrid. El jueves 11 de abril de 2002 hubo un golpe de Estado contra Hugo Chávez, siendo presidente de España José María Aznar. Damos un salto hasta el 22 de noviembre de 2004, es lunes y se emite el programa 59 segundos por la Primera. Ante las cámaras, el ministro de Exteriores de Zapatero, Miguel Ángel Moratinos, hace público que el embajador de Aznar en Caracas, Manuel Viturro, recibió instrucciones y ayudó a legitimar aquel golpe de Estado dándole cobertura internacional. Criticado por el PP por haber desvelado secretos de Estado, Moratinos se ratificó el miércoles 1 de diciembre ante la comisión de Exteriores del Congreso y añadió algunos documentos desclasificados más: los telegramas que el embajador cursó a Exteriores y cómo el Gobierno Aznar asumió desde el primer momento el lenguaje de los sublevados; que, cuando ya no se podía dudar de que era un golpe de Estado, ordenó a su embajador que se entrevistara con el líder golpista, Pedro Carmona; calificó ante la Unión Europea de Gobierno provisional a la autoridad ilegítima y evitó en todo momento condenar su actuación. Estados Unidos condenó el golpe el día 13, y España, no. Fuimos los últimos de Venezuela. Esperamos hasta que el golpe fracasó totalmente, el día 14, para condenarlo, denunció Moratinos.
 
Telegrama de Viturro, 8 de abril: la Confederación de Trabajadores de Venezuela anuncia, con apoyo patronal, una huelga para el martes día 9, que podría llegar a ser indefinida. Entre tanto existe riesgo algunos sectores oposición [lenguaje telegrama] intenten aprovechar situación para, una vez más, incitar al ejército a derrocar al presidente Chávez. El día 9 menciona la presencia en Caracas de un militar de gran prestigio, el general Enrique Medina Gómez, que podría liderar golpe cívico militar. Los acontecimientos se desataron el 11 de abril, con el confinamiento del presidente Hugo Chávez y la intervención de francotiradores que produjeron una veintena de muertos. Una de la madrugada del día 12: lo ocurrido puso ayer tarde muertos necesarios [así: ¡muertos necesarios!] para provocar intervención del Ejército, única fuerza en este país, frente a debilidad de los partidos políticos oposición, capaz poner fin al Gobierno del presidente Chávez. Horas después, Viturro informó muy precisamente de cómo el empresario y líder civil de la sublevación, Pedro Carmona, había conseguido renuncia ex presidente Chávez tras destituir al vicepresidente de la República en un intento de cubrir jurídicamente cambios se están produciendo sobre la base combinada del artículo 350 de la Constitución venezolana, que señala que el pueblo de Venezuela desconocerá cualquier Gobierno que contradiga los principios democráticos, y del artículo 233, que regula la sucesión en caso de acefalía del Estado.
 
Moratinos subrayó que esa argumentación, orientada a crear un vacío de poder, era esencial para que, del caos, pudiera surgir un Gobierno aceptable, pues la Carta Interamericana aprobada por la OEA en 2001 impide a todos los firmantes, incluida España, reconocer a las autoridades surgidas de un golpe de Estado. Pero el argumento era además falaz ya que en la línea de sucesión figuran el presidente y vicepresidente de la Asamblea Nacional, que no habían dimitido y se oponían al golpe. Ignorando estos hechos, que el Gobierno español debía conocer, Carmona disolvió la Asamblea y se proclamó presidente, alegando una falsa acefalía del Estado, a la que Madrid se refirió oficialmente como vacío de poder, en lugar de hablar de golpe de Estado. Pese a ello, Viturro fue instruido desde Madrid para que, junto con el embajador de EEUU en Caracas, visitara a Carmona. Moratinos subrayó ahí su sorpresa por que se hablara de futuro con un Gabinete que era ya indiscutiblemente ilegal y golpista. De hecho, Aznar respondió a la llamada telefónica del líder golpista y el comunicado emitido por el Ejecutivo español el día 12, en calidad de presidente de turno de la UE, confía en que el Gobierno de transición respete los valores democráticos.
 
En el mismo programa, añadió que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero mantenía muy buenas relaciones con todos los países iberoamericanos. La diferencia de esta nueva política es que se dirige a todos los países de Iberoamérica y sobre todo a quienes reciben el respaldo democrático, y el señor Chávez ha recibido un apoyo masivo, enfatizó el ministro. Moratinos se vio confirmado por la ex ministra de Exteriores de Chile, Soledad Alvear, y por el ex secretario de Exteriores de México, Jorge Castañeda, quien el 28 de noviembre de 2004 denunció a los medios que Colombia, España, El Salvador y EEUU apoyaron el golpe el 11 de abril de 2002. Si Moratinos habla de Hugo Chávez como de un político que cuenta con el respaldo democrático masivo, ¿por qué después la etiqueta del PSOE hacia Venezuela ha cambiado de democracia a dictadura (y basta con leer el diario El País)? El cambio estalló con el célebre ¿Por qué no te callas? del Rey a Hugo Chávez (10 de noviembre de 2007), dentro de la 17 Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado, en Santiago de Chile.
 
El presidente venezolano había vuelto a denunciar a Aznar, revelando una conversación que mantuvo con él en julio de 1999. Aznar le dijo: Vengo a invitarte a que te unas a nuestro club, tienes petróleo, tienes que incorporarte al primer mundo, basta que tú lo decidas, ya que tienes un fuerte apoyo popular y político. Pero yo tenía que dejar las relaciones con Cuba, Aznar me dijo que no me convenía la amistad con Castro, Fidel Castro, que para mí es como un padre, un padre revolucionario, un ejemplo de dignidad, de lucha, de resistencia a un imperio, contó Chávez. Entonces, yo le hice una preguntita. ¿Mira, Aznar, tú qué opinas de Haití, de Centroamérica y de África? Aznar me respondió: Esos se jodieron. Ahí mostró todo el rostro horrible del fascismo y del racismo. Una serpiente es más humana que un fascista o un racista; un tigre es más humano que un fascista o un racista, agregó. Rodríguez Zapatero pidió la palabra para reprochar a Chávez los ataques a Aznar, antes de recordarle que fue elegido por los españoles. Entre las réplicas de Chávez, Zapatero insistió en exigir ese respeto para el ex presidente. En ese momento, el Rey se incorporó en su silla para dirigirse a Chávez y espetarle: ¿Por qué no te callas? El efecto más extendido en España fue Ole mi rey, don Juan Carlos los tiene bien puestos. Y se hicieron camisetas con el ¿Por qué no te callas? Ya para entonces la degradación de Venezuela formaba parte del código ético del bipartidismo. Como perros rabiosos utilizaron ese puerco argumentario para descalificar a Podemos y a dirigentes de Podemos. Y hoy Manolo el del bar, buena persona pero que se deja influir, cuando algo no le gusta, dice que eso será bolivarismo, y se queda tan fresco.
 
Daniel Lebrato, Ni tontos ni marxistas, 23 del 6 de 2015
 
 
 
 

Vídeos
históricos más vistos

Últimas entradas más leidas

 
 
 
 
© 2024 Portal Sanlucardigital.es
Joomla! is Free Software released under the GNU General Public License.
 
Síguenos en
       
Sanlúcar Digital  ISSN 1989-1962