La presidenta de Ciudadanos se enfrenta a unas duras elecciones autonómicas con unas encuestas adversas y con el PP y el PSC dispuestos a repartirse los restos del partido ante su posible naufragio en el que ha sido su feudo.

La inesperada decisión de Lorena Roldán de abandonar Ciudadanos para ir como número dos de la candidatura por Barcelona del líder del PP catalán, Alejandro Fernández, a menos de dos meses de las elecciones autonómicas del 14 de febrero, ha conmocionado al partido de Inés Arrimadas en el que mucho antes de que se materializara esa operación ya cundía la preocupación ante esos comicios. Ciudadanos parte de un listón muy alto tras la histórica victoria que protagonizó la propia Arrimadas en 2017 frente a un nacionalismo cada vez más fuerte. Ahora la reprochan también haber abandonado esa tierra para irse a hacer política a Madrid.

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