Visto lo visto y ante los quebraderos de cabeza que me ha producido el Politiquito Frankesteín, tenía en mente no repetir la idea, pero como la carne es débil y por suerte existen las aspirinas, pues hala aquí tienen otra vez a este su articulista.

José Luis Zarazaga.-El sábado de madrugada estando en el séptimo sueño empecé a sufrir una pesadilla no se si fruto de haberme tomado a chufla el tema de las deserciones políticas que se rumorea por las calles o quizás esperaba que apareciera la criaturita que nuestro Doctor Frankestein había creado.

Algo llamó mi atención y no se si entre en un sueño menos profundo o fui víctima de un ataque de sonambulismo, lo cierto que es que oí unos pequeños golpes en mi ventana y me asomé diligentemente para ver que pasaba; lo curioso era que se trataba de un pequeño murciélago, al que comúnmente llamamos vampirito, que pugnaba por entrar.

Como me gustan los animalitos, iba a abrir la ventana para que no siguiera golpeándose, pero cual fue mi sorpresa que de pronto empezó a tomar forma humana en la figura de mi queridísima vecina la alcaldesa. No saliendo de mi asombro, parecía que me decía “José Luís déjame entrar, solo es un mordisquito”, la verdad sea dicha estuve tentado de abrir la ventana, pero ahogando un grito terrible de mi garganta le dije: “Ahí te quedas, tu no vengas a pedir una taza de azúcar como todas las vecinas, sino que encima vas a venir a picarme y convertirme en un socialistas reconvencido”.

No se si fue fruto de mi mente calenturienta o del sobresalto que me desperté inmediatamente y menos mal, en la ventana no había nadie, todo había sido una horrible pesadilla fruto de los últimos acontecimientos ocurridos en nuestro Salón de Plenos Municipal.

Dejando un poco de lado y creo que influido por la idea del curso de guiones de cine, empezó a venirme a la memoria  una recreación de  la historia política de nuestro pueblo. Debemos de retrotraernos a las postrimerías del siglo pasado, concretamente hace ya 10 años cuando el Conde Cuevas Drácula ha sido destruido; más sus discípulos prosiguen no muertos, extendiendo su estirpe como una enfermedad así como un culto maléfico que persigue la erradicación del Peperismo.

Ciertamente la trama de la historia ofrece una constante alusión a los ritos políticos para acabar con el Vampirismo Popular, caso claro en la lucha en que el Vampiro Mora es destruido, siendo ocupado su cargo por un Nosferatu que por lo menos agrada mucho más con su presencia. Y por lo cual muchas miradas superficiales lo han tachado de panfleto  político.

La verdad sea dicha y yo lo interpreto más bien como un elemento de enfrentamiento escénico, es decir, la cara cruz de un dilema, dos fuerzas enfrentadas entre si con un único fin, que al final acabó cumpliéndose: “Extender sus alas por la alcaldía”.

No contento con crear un ejercito de 11 conversos,  nuestro agradable Nosferatu es prontamente influenciado por su principal  sirviente no muerto: “Entiéndase funcionario de Empleo Verdún  y su seguro servidor García Garrido”, para que capte cierto número de adeptos y así mantener su reinado. Inmediatamente y con muy buen criterio son mordidos los tres miembros del CIS que por el motivo que todos conocemos pasaran a formar parte de la cohorte de adeptos de nuestra alcaldesa, incluyendo varios sirvientes más que pululan día y noche por los pasillos municipales indagando donde se esconden nuevas víctimas que engrosarán la causa.

Todo había  salido a la perfección. Nuestro  agradable y querido Nosferatu, alimentado por la sangre del Pueblo que se le suministro aquel 27 de mayo renació de las cenizas y además creó una cohorte de adeptos que tan buenos resultados le está dando, todo apuntaba a que se iniciaba un período de paz y tranquilidad, pero no es así aparece en escena otro personaje: “Van Helsing Prats”, que se ha encontrado con su ayudante Berenguela y ha comprobado con horror, como ésta, oculta y avergonzadamente está siendo llevada al círculo pernicioso junto con un nuevo adepto que se prefigura en la figura del Cuevas..

Visto que semejante horror no se cura ni con un chute de Ortalidón, Nuestro Van Helsing Prats jura venganza y promete acabar con el reinado de maldad que se ha instalado en la alcaldía. Lo que nunca llegaré a comprender es que me parece que  ha sido subyugado por nuestra queridísima Nosferatu , ya que todos lo ataques los dirige contra tres de sus adeptos: “los terribles vampiros Marín, Reyes y Alhambra”, incluyendo a sus allegados y alegres servidores no muertos.

Nuestro Van Helsing Prats particular, lo único malo que tiene es que no acierta una , venga a dar  estacazos a diestro y siniestro, pero como no los pincha en el corazón nada de nada, lo único que ha logrado hasta ahora es llenarles el traje de agujeros y aquí lo siento mucho, pero nuestro pueblo no va a ganar para sastres y nos va a dejar hasta sin viruta las carpinterías.      

Continuará…… 

Nota aclaratoria: Yo se que mi queridísima alcaldesa no se lo va a tomar a mal, es simplemente sana ironía, asimismo se que mi amigo Antonio se lo va a tomar con una sonrisa, es simplemente aunque a algunos les moleste, una pequeña chufla en la cual, el único parecido con la realidad es pura coincidencia.     

24:00 horas del pasado miércoles, Castillo Palacio Municipal, situado en la cuesta de Transilvania, s/n. Van Helsing Prats vaga por los pasillos sombríos y se encuentra a una muchaca atrapada que le solicita ayuda para huir del lugar. Ella es una concejala de su grupo de adeptos, intenta ayudarla pero algo atrae su atención, su cuello ha sido mordido, es una trampa, aterrorizado clama venganza y jura no parar hasta acabar con los vampiros que nos gobiernan y ocupar el tan sacrosanto lugar, para lo cual no dudará en ningún momento ser convertido…………