Abril siempre ha sido considero y creo que no solamente por este junta letras, que no es más que su humilde desarticulista, como el mes primaveral por excelencia y preludio de todas las fiestas que se nos avecinan.

José Luis Zarazaga.-Se define como un mes cargado de historia reciente ya que acabamos de pasar por el aniversario de la proclamación de la Segunda República y pronto nuestros vecinos celebrarán el aniversario de la Revolución de los claveles. ¡Ah bendita primavera, que la sangre altera! Andaba este humilde desarticulita con la sangre alterada, ya que nadie le daba referencias sobre una palabra que definían algunos por malsonante y que gracias a ese pozo de ciencia lingüística que es mi gran amigo Miguel Ángel he llegado a entender en todo su significado. “Chichinabo: según la R.A.E. es ser de chicha y nabo.”

Tengo que aclarar que chicha proviene del italiano ciccia, y aunque hoy es una palabra propia del lenguaje infantil para denominar a todo tipo de carne, antiguamente se utilizaba para nombrar a las carnes de peor calidad. Por su parte, el nabo es una hortaliza con un valor nutritivo más bien escaso. Rico en agua, pero pobre en proteínas e hidratos de carbono. Por ello eran las clases más humildes las que se alimentaban de chicha y nabo, y de ahí la expresión. Pero por favor mis sufridos lectores, cójanlo por las hojas, nunca por la raíz, mira que alguno suele ser mal pensado y al final acaba todo teniendo un sentido más bien político.

Si la Real Academia lo define como una cosa de poca importancia, despreciable, que no vale para nada, que es baladí, etc. , me parece a mí que nuestros sesudos catedráticos es que habían hecho cátedra anteriormente, pero creo sin ninguna duda que se doctoraron en nuestra universidad política local. Visionando la creciente hemeroteca de nuestro medio digital encuentra uno una cantidad de alocuciones tanto verbales como audiovisuales dignas de ser galardonadas con el premio chichinabo del año.

Tengo que aclarar que si hubiera que premiarlos a todo faltaría espacio en la Colonia para sembrar semejante producto. Comenzaremos dando el premio chichinabo a la memoria histórica. Máximo galardón para Don Juan Marín por su video homenaje a Silva Barragán, hasta aquí todo correcto, pero mira que decir que fue el fundador del primer partido independiente de Sanlúcar. ¿Dónde has dejado al GIBA?, premio de castigo “dos orejas de burro y de rodillas contra la pared”; suspendido en historia.

Premio Chichinabo a la solidaridad bien entendida.En este caso se le debe de dedicar a todos aquellos políticos y aspirantes a políticos que con tal de salir en la foto y medrar en esto no han alzado su voz para pedir y apoyar con contundencia que se construya ya el Centro de Adicciones. Señor Parada, con todos mis respetos, usted debería de recogerlo en nombre de toda la oposición política de este pueblo, no ya por haber criticado a la alcaldesa, sino más bien por no haber apoyado dicha instalación y utilizando su talante negociador hacer comprender a los desinformados que dicha instalación no tiene nada que ver con un centro de drogodependencias.

Ya lo he dicho más de una vez, en política no todo vale, y una buena labor de la oposición es apoyar y gestionar que instalaciones y servicios públicos vengan a desarrollar nuestra localidad. Me pregunto lo siguiente: ¿si fueran ustedes los que gobernaran y la Diputación quisiera instalar dicho centro, cuál sería su actitud?; estoy seguro de que lo venderían como todo un logro de gestión.

Tercer premio chichinabo para mis amigos los ecologistas, y este es un premio pensado en verde. Mira que dais la vara en lo que os interesa, sobre todo cuando hay una cámara de televisión delante, pero ¿Cuánto tiempo lleva la palmera de Madre de Dios muerta?; ¿por qué no habéis chillado para que se talara y se quemara antes de que se hubiera instalado una cigüeña? La palmera lleva ya varios meses muerta y no habéis dicho ni esta boca es mía. Una parte del premio lo podéis dedicar a mi Delegada de Mal Ambiente, por no haber actuado con celeridad, ya que la plaga del picudo rojo va a seguir extendiéndose, pero lo que no es de recibo es que encima andéis amenazando, esas no son formas y para eso formáis parte del Consejo Asesor de Medio Ambiente..

Por último y para no extenderme demasiado, que después me llamáis pesado, el premio chichinabo de consolación va dedicado a mi querida Gerente de Urbanismo. ¡Ole, ole y ole, tu mal gusto! Vayas farolas que no has instalado en la Calle Santo Domingo y Barrameda. ¡Por Dios cámbialas, que como dicen en mi pueblo, son más feas que un pie cagado o mejor dicho que un tiro de mierda! Lo siento amigo Pepe, tú te has quedado sin premio.

 En fin, no me extiendo más, pero parafraseando a un gran junta letras como André Malraux: “en la política es a veces como en la gramática: un error en el que todos incurren finalmente es reconocido como regla.”