"Amiga Inma, y sin que sirva de precedente, tengo que felicitarte por la política de austeridad y ahorro que estás manteniendo,  daré al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios, y este caso te felicito por tu labor lenta y callada en un tema tan aburrido como es la economía."

José Luis Zarazaga.-Hoy este su humilde desarticulista quiere comenzar sus chanzas literarias hablando sobre algo que para la mayoría de los ciudadanos suele ser un tema totalmente árido, es decir “Cultura”, pero no se asusten, puede ser algo árido, pero nuestros políticos locales es que ni siquiera conocen de que va.
Yo creo que  este Equipo de Desgobierno tiene por creencia que la cultura es andar poniendo placas por las calles a todos aquellos religiosos que según parece son el sumun de la bondad y las buenas obras a favor de nuestro pueblo. Como decía el comentarista “Dios mío, otra vez gobierna el Partido Popular”

  Prefiero el comentario de Karl Marx que  la concebía como “la naturaleza transformada en hombre”. ¡Un pase por la izquierda, por favor!

    Hace unos días me remiten un correo electrónico donde se me anuncia algo ya por mi sabido, ya que me había tomado la molestia de leer la programación cultural y festiva de nuestro pueblo. Decía así “El Equipo de Gobierno elimina el Festival de Jazz”, no pienso rasgarme las vestiduras y por una vez felicitaré a Mariuca Cano por tan acertada decisión, como dirían en mi pueblo y pido perdón por adelantado, ¡Olé tu coño!, medida valiente y ahorrativa donde las haya.

   Nunca he entendido porque se ha mantenido dicho festival en detrimento del festival de música clásica. Aun recuerdo aquellas palabras de una antigua Delegada de Incultura que nos deleitaba con hermosas frases como que lo popular no era cultura, pero sí que es curioso que convertir el Castillo de Santiago en sede de la farándula y del bebercio veraniego si es cultura. Malas pasadas juega la memoria.

   No corresponde a nuestro Equipo de Desgobierno hacer cultura, pero si crear las condiciones para el acceso de todos los foráneos y sanluqueños a la cultura, hay que proporcionar las condiciones necesarias para lograrlo y sintiéndolo mucho, si nadie acude a un acto de determinadas características, la decisión acertada es eliminarlo de un plumazo. Lógico es que en la sociedad que vivimos impera el mercado, a ningún empresario se le ocurrirá mantener una obra en cartel si no va nadie a verla.

   Sois gestores de lo público y si como creo saber que ningún grupo de jazz ha querido actuar haciéndose cargo de los ingresos por taquilla, es que ciertos festivales se han convertido en un chupadero de dinero público y eso no podemos permitirlo el resto de los ciudadanos.

   Esto no quiere decir que haya que subyugarse al mercado, es preciso que nuestro Equipo de Desgobierno sepa tener humildad, pero al mismo tiempo no debe paralizarse ni optar por la omisión. No podemos permitir que  deje la cultura al vaivén de los vientos y la entregue  a los sabores y caprichos del dios mercado. Creo que el mercado no lo es todo y confío en que no lo será nunca.

   En fin creo que no me equivoco si solicito a este Equipo de Desgobierno otras medidas un tanto valientes, pero no por ello menos necesarias y además comprensibles por toda la ciudadanía.

   Ya el año pasado se eliminó la cabalgata de verano con motivo de las obras del Plan E, acertada decisión y nadie se rasgó las vestiduras.

   Podemos acabar este año con la sangría que produce en las arcas municipales las Fiestas de Exaltación al Rio Guadalquivir, creo que a nadie le importará que se deje de celebrar lo que se remedó de la Televisión Franquista “Reina por un Día”; que no se subvencione la brutalidad de los toros, si es una empresa privada que actué según taquilla.

   Son medidas simples y la mayoría del pueblo las va a aplaudir, hagamos algún acto cultural, como cuando se establecieron unas glosas literarias, si quiere se convoca un premio literario destinado a la exaltación y el dinero ahorrado inviértase en lo que siempre agradecerá dicho rio, su mantenimiento y cuidado que es el mayor legado que podemos dejar a las generaciones venideras.

     Pero el mercado no es todo ni lo será nunca. Sabemos muy bien que en materia de cultura, así como en salud y educación, hay que examinar y corregir las distorsiones inherentes a la lógica del mercado, que siempre está regida, en última instancia, por la ley del más fuerte. Sabemos que es preciso, en muchos casos, ir más allá del inmediatismo, de la visión de corto alcance, de la estrechez, las insuficiencias e incluso la ignorancia de los agentes del mercado. Sabemos que es preciso suplir nuestras grandes y fundamentales carencias.

    Amiga Inma y sin que sirva de precedente tengo que felicitarte por la política de austeridad y ahorro que estás manteniendo,  daré al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios, y este caso te felicito por tu labor lenta y callada en un tema tan aburrido como es la economía.

   Si te daré un último consejo, ya que la austeridad ha llegado a la cultura y desgraciadamente al medio ambiente, podrías seguir las tesis aplicadas con el Festival de Jazz y eliminar las subvenciones a la Sociedad de Carreras de Caballos. ¿No es un organismo privado que se rige por la ley del mercado?, ¿ya que cobra entradas, pues no debería de financiarse y dejar de chupar del bolsillo del contribuyente?

   Si el numerito de David Bisbal cuesta 83.000 Euros y se han puesto a la venta 5000 entradas a un mínimo de 30 Euros, quiere decir que la taquilla aporta 150.000 euros, ¿por qué cuesta después dinero al resto de los contribuyentes?; no hay que estar muy versado en economía para saber que algo falla.

    Yo propondría y sería una medida digna de elogio, que todos los concejales renuncien a su invitación y todo tipo de protocolo, que ya estamos hartos de ver como ciertos personajillos que pululan por alrededor tienen las entradas gratis y es de recordar que algunas veces se han visto dichas entradas cambiando de manos por los alrededores.

   Si las cifras más cortas darían 100 entradas de protocolo, se renuncia a dicho despilfarro y se ceden a Caritas o  a otro organismo para que las distribuyan entre aquellas víctimas de la crisis que por un momento podrían disfrutar abandonando sus preocupaciones diarias.

   Solo es una idea y el Equipo de Desgobierno al igual que España llegando a la final haría Historia.