Sufriendo aún los  últimos coletazos que nos da lo que denominamos comúnmente el veranillo del membrillo, este su humilde desarticulista tiene que tirar de hemerotecas para intentar comprender que tienen de especial estas fechas, ya que al acercarse San Lucas, el denominado como nuestro Santo Patrón, cualquier Pacto de Desgobierno se tambalea.

José Luis Zarazaga.-Si no me creen repasen los acontecimientos y pregunten a nuestro amigo Antonio Prats que seguro que rememorará infaustos recuerdos.

Hoy nuestro gran amigo Pepe, lo que no obsta para que yo lo considere un tirano y aunque también hay que agradecerle su apoyo a la huelga general, nos sorprende con la que es la segunda y además demoledora noticia política del mes que finaliza, recordemos que la primera fue la impugnación de la candidatura de Antonio Prats y hoy la posible ruptura del Pacto de Desgobierno.

 A Sanlúcardigital le tengo que dar la credibilidad máxima, cosa que no voy a hacer con otros medios de comunicación local, pero de ahí a que la ruptura se pueda producir, queda un abismo.

Esto me recuerda,  como cuando hace cosa de siglo y medio le iban  a D. José de Echegaray con planes babilónicos de ingeniería económica, y respondía nuestro regular dramaturgo y mejor economista: “no, si poder, se puede; también puede uno calentarse con billetes de banco pero... es un poco caro”. ciertamente poder se puede romper, pero a mi parecer también será bastante caro.

 

Es lógico que a ocho meses de las elecciones se quiera mostrar cierta divergencia, lo contrario sería llegar a la campaña sin poder presentar una alternativa viable. Cuando comenzó este pacto ya dije  claramente hace ya tres largos años que el CIS había cometido la mayor de las torpezas, después comenté que vaciaron el agua de la bañera con Aurelio dentro y si todo lo que se vaticina se cumple, Irene vaciará la bañera con el CIS dentro.

 

 Aunque hoy mismo se confirma que Irene ha retrotraído el pacto a sus inicios cesando a  dos funcionarios de empleo de dicha formación, esto no debería de entenderse como una ruptura, simplemente es la respuesta lógica al desplante que sufrió en el pasado pleno.

 

Creo recordar que se nos ha ido vendiendo  que estábamos frente a un pacto político muy difícil de romper. El pacto de PSOE y CIS en el Ayuntamiento  se ha estado manteniendo firme. Las declaraciones de lealtad de los políticos nos han ido dejando  claro que este pacto se mantendría casi con seguridad hasta la convocatoria de elecciones, porque tiene unas bases muy sólidas. Desde el principio  el CIS ha vinculado su destino a un pacto con el PSOE, al  aliarse contra un enemigo común, el partido Impopular,  y con el mensaje claro de sacar a la ciudad de la bancarrota en que se encontraba.

 

No quiero extenderme, ya que un análisis político en profundidad llenaría el Libro Gordo de petete, pero tengo que reconocer que la chiquitilla tiene arte, aparte de pocos escrúpulos políticos. Primero divide al enemigo, ya que menuda la que le está lloviendo a Antonio Prats, segundo tenso la cuerda hasta el máximo extremo, pero no la rompo, si  la rompo es claro que los hago unos mártires, pero si la rompen ellos, son unos traidores, extraño dilema, ya que en los dos casos se puede definir la alternativa como un suicidio electoral.

 

El suicidio o suicidarse se entiende como: “quitarse voluntariamente la vida”, y si lo tratamos en sentido, suicidarse políticamente podría ser “marchar resueltamente, sin que nadie te ayude, hacia el abismo de la oposición“. Toda elucubración nos llevará al mismo punto “a la alcaldía y a su inquilina”, y todo intento de alcanzarla encontrará un mismo obstáculo que se llama Irene.

 

A mí los órdagos no me gustan porque en política, como en la vida, las cosas no se anuncian, sino que se hacen, Lo mismo que se anunció un pacto, se tiene que anunciar por qué no se rompe, pero esto último con claridad y sin medias tintas, además de seguir adelante con todas las consecuencias que eso tiene.. 

 

Y es que, dentro de mi humilde entender, cuando se adquiere una responsabilidad tan importante como la de gobernar, "se está desde el primer día hasta el último". Y, si hay un motivo para la ruptura, se debe "presentar ante la opinión pública de manera muy seria. No quiero oír,” hoy me quedo mañana me voy”, eso no es serio.

 

Como diría Delibes: “La Sombra del Ciprés es alargada”,en el caso que nos ocupa creo que “la sombra de San Lucas es alargada”. Me pregunto ¿Será verdad o estos dos grandes actores siguen interpretando?  Continuará……..

¡Menos mal que aún nos queda Sanlúcardigital!