El viernes pasado, este humilde desarticulista, al igual que muchos ciudadanos de nuestra localidad, tuvo la oportunidad de visionar un espectáculo teatral digno de elogio. Quiero aprovechar la ocasión para felicitar a los integrantes de Teatro de Bolsillo, por su profesionalidad y su saber estar en un escenario, ya que hicieron que olvidara por un par de horas todos los problemas que nos aquejan

José Luis Zarazaga Pérez..- El espectáculo se cerró con una maravillosa interpretación de un baile, pueden ver el vídeo colgado en este nuestro medio digital, donde uno de los elementos principales era el uso de las panderetas con una sincronización perfecta.

   En nuestro día a día dentro de la política local, como no iba a ser menos se toca la pandereta con mayor o menor maestría, aunque algunos no se hayan enterado que todo tiene su arte y tocar la pandereta no significa el dar golpes y soltar exabruptos.

   Si no fuera porque hay que ser moderado en los comentarios, ya que alguno se lo toma todo a pecho, diría que nuestra querida Chiquitilla viendo la que se está montando va a tocar ya la pandereta hasta con sus zonas pudendas. Pido disculpas a Pepe por el comentario, pero no puedo decirlo en sanluqueño que nos censuran.

 

   En nuestro pueblo cuando se intenta tocar la pandereta se tiene por norma el intentar que la música suene a gestión eficiente y preocupación por los problemas que nos aquejan, pero al final siempre se mete  la cuchara en la sopa de ajo y descubrimos que lo que cuenta es la conveniencia personal de unos pocos.

 

   Nunca he creído en los que proclaman su independencia en vista a un solo sector de la sociedad, no me valen las plataformas cívicas, la pandereta se toca al igual  para todo el mundo, y en ese punto si le voy a dar parte de razón al CIS,  “han tocado la pandereta acompasadamente con el resto del Equipo de Desgobierno y eso ha llevado a nuestro pueblo a cotas de tranquilidad política nunca vistas”

 

   Eso es engrasar la pandereta y tenerla tensa, lo que no quiere decir que la música que produzca sea siempre agradable, ya que la mano de quien la toca es una pieza demasiado importante.

  Tocar la pandereta a martillazos como ha hecho el Partido Andalucista, tiene una consecuencia clara. “mucho ruido y rotura de su fondo”, consecuencia lógica: “se acabo la música”, o mejor dicho, el ruido de fondo.

 

  Del Partido Impopular, pues que decir, ya es que ni  me molesto, ya que su candidato al que denominan alegremente como el Muermolejo, está en la inopia y no se ha dado cuenta que las panderetas no funcionan a pilas, que hay que saber tocarlas, en fin, no digamos nada más que seguro que ese no desafina, sino que chirría.

 

   Ya no me existiendo más que después mi sufridos lectores se cabrean con uno, pero quiero aprovechar la ocasión para felicitar a la nueva plataforma, pero les sugiero que esperen un poco que la Chiquitilla nos va a montar un nuevo Conservatorio de Música y mira por donde pueden ir junto a Izquierda Hundida a dar clases de pandereta, ya que si la vais a tocar por lo menos que sea con gracia.

 

   Para finalizar solo puedo gritar ¡Joder la que nos espera de aquí a las elecciones, pobre de nuestros oídos, yo por si acaso voy corriendo a comprar una partida de zambombas para recibir al Obispo ese!

 

     No me seáis mal pensados, que es para recibirlo con los honores que se merece.

    Ah se me olvidaba, tocar la pandereta en mi pueblo tiene también otro significado, pero no puedo decirlo que mi editor me despide, y no me sean mal pensados, joder.