La cara oculta del sindicalismo.

José Antonio Córdoba.-Cada día resulta más difícil sentarte a escribir, para el público, que lean o no estas líneas es algo que nunca me ha preocupado, pues es una afición y además me gusta. Resulta difícil, pues las ideas se me vienen a la mente, como la gente en unas rebajas, a tropel, terminando por instarles aquellas que hacen referencia a la situación social, de las que ya he escrito algunas.

Un tema que seriamente me preocupa, es el de ETA. Pero no me preocupan en sí estos indeseables ciudadanos del algún lugar del norte. Es preocupante el poder mediático con el que los medios de comunicación atiendes a estos individuos. De una proyección de varios segundos de un comunicado de este grupo, los medios los mantienen en antena, mínimo dos días, en casi todas las franjas horarias.

Sentemos en una piedra, de éstas que ahora con la humedad te cala la ropa y te deja tus partes frescas para un buen rato, y preguntémonos si: ¿es preciso divulgar los comunicados de esta lacra social?

Mi respuesta es rotundamente ¡¡NO!!

 

Enero empieza con otro tema al que todos los ciudadanos deberíamos darle las espaldas, me refiero a los sindicatos. ¿Dónde están?, y quizás la pregunta más acertada sea: ¿para qué están?

Que hacen los sindicatos por todos los trabajadores, que de un plumazo ZP, hemos dejado de serlo. Nuestra pregunta a estos sindicatos es: ¿Volveremos a trabajar algún día?

 

Que los días pasan es algo palpable, pero aún lo es más la cantidad de personas, que están sufriendo esta crisis, que han pertenecido a gremios toda su vida y ahora se preguntan ¿Qué vamos a hacer?

 

Recuerdo campañas políticas anteriores donde realmente llegamos a saber de la existencia de dos grupos sindicalistas. A la fecha de hoy y si no es porque te das una vuelta por la Calzada, no sabes nada de ellos.

¿Han preferido los sindicatos agachar la cabeza ante esta situación y olvidar al trabajador? ¿Somos los trabajadores las bazas para que estos sindicatos se ganen otro punto frente al Gobierno y a costa del alimento de nuestras familias?